domingo, 17 de octubre de 2010

Menudo paisaje !!!


Me revienta la gente cerda. Me pone de los nervios ver a gorrinos tirar latas de refresco por las ventanillas de sus coches mientras van conduciendo por una carretera de montaña, o el que abandona sus trastos viejos o material de desecho de alguna obra en algún lugar recóndito en el campo. O el que, caminando por alguna calle de cualquier ciudad, tira el envoltorio del chicle en el suelo, teniendo una papelera a unos pocos pasos. O aquel fumador compulsivo que, mientras se mata alegremente llenando de veneno sus pulmones, nos obliga al resto de los mortales -que no tenemos tanta prisa por morir- a vivir encontrándonos sus apestosas colillas en los sitios más insospechados.
El mundo sería un lugar un poco más maravilloso si nos preocupáramos un poco por dejar las cosas tal y como las hemos encontrado, o incluso mejorarlas, si está en nuestra mano. Pero hay individuos que se empeñan en llenarlo de mierda, sin detenerse lo más mínimo en pensar que quizás existan otras personas a las cuáles les disguste vivir entre porquería. Seguramente, a estos "cerdos humanoides" en cuestión no les entra en la cabeza -parte de su anatomía bastante limitada, sin duda- que nosotros disfrutemos de la limpieza, ya que ellos se encuentran como diós revolcándose entre la basura y están igual de civilizados que una empanadilla.
La foto que véis la he tomado este domingo por la tarde en la zona de mi pueblo donde cada domingo por la mañana se lleva a cabo el "mercadillo", pero seguramente no se diferenciará mucho de otros tantos lugares donde se celebran estos eventos. No sé quién será más cerdo, si los paradistas o el ayuntamiento, pero clama al cielo que esto es una guarrería al nivel de la granja porcina más poblada. Y no me vale que me digan que luego pasa una brigada municipal a limpiarlo, pues hasta que esto sucede, miles de bolsas de plástico y envoltorios varios ya han echado a volar con el viento y se han perdido en el horizonte, para aterrizar al lado de la lata de refresco que tiró, hace algún tiempo, aquel cerdo que conducía su coche por una carretera de montaña.

Triste, muy triste :-(

P.D. Y que luego nos hablen de reciclaje las 24 horas del día. Menudos coj**es tienen.