viernes, 20 de marzo de 2020

VAYA SEMANITA !!!

Pues ya llevamos una semanita encerrados en casa para combatir al COVID-19, amig@s. En mi caso, sólo he salido dos veces: una, para tirar la basura -vivimos en un piso pequeño y no queremos convertirnos en un estercolero- y la otra, para ir a comprar comida, pues parece ser que mi estómago no acaba de entender aquello de "a menos actividad, menos comida". Eso sí: al salir, con mascarilla y guantes, para ayudar en la medida de lo posible a que termine pronto nuestra reclusión.

La verdad es que lo llevo bastante bien. Supongo que estoy bien entrenado, pues debido a mi oficio -cantante de orquesta- tengo que superar muchas horas muertas entre pase y pase o bien entre bolos. Tengo la suerte de tener bastantes hobbies que me mantienen entretenido, el principal de ellos los videojuegos. Creo que tengo una cantidad tal que me permitiría jugar durante 3 vidas seguidas sin parar mas que para dormir un poco. E incluso seguro me daría para alguna vida extra.

Lo más complicado de estar encerrados en casa es tener a los peques entretenidos; esos seres llenos de energía a rebosar -quién la pillara- y que, a pesar de tener aún toda la vida por delante, denotan una intolerancia tremenda a todo lo que sea dejar pasar las horas sin más, sintiendo la necesidad imperiosa de hacer cosas todo el tiempo y, a poder ser, totalmente diferentes de las anteriores. Los videojuegos, en su caso, también ayudan bastante, pues han salido a su padre, pero hay que dosificarlos -como todo en esta vida- y poner un horario, sin olvidarse tampoco de los deberes del cole, tomar el sol y el aire en la terraza comunitaria -sin aglomerarse, por supuesto- e intentar llevar una vida lo más normalita posible, dentro de la anormalidad.
Una cosita: utilizar el whatsapp para que hagan una videollamada con tres de sus amigos al mismo tiempo también les encanta y les permite seguir en contacto con sus compañeros del cole, muy importante para ellos en esas edades. Y resulta de lo más interesante escuchar las conversaciones que mantienen y como se desenvuelven en ese medio nuestros peques.

Y para dejar de daros la chapa, una recomendación importante: NO HAGÁIS LOS GILIPOLLAS Y SED MÍNIMAMENTE SOLIDARIOS E INTELIGENTES; quedémonos en casa todo lo posible para que esta mierda se acabe pronto. No seamos listillos -normalmente los que se creen "listillos" acostumbran a ser los más tonticos de todos- y nos creamos que esto no va con nosotros. Como más pongamos de nuestra parte, más pronto volverá todo a nuestra añorada normalidad. Que esto no es como cambiarse de carril en el último momento en un atasco para colarte cuando la buena gente hacemos cola respetuosamente. Esto es bastante más serio, IMBÉCIL !!!

Dicho esto y después de escupir un poco de veneno para aliviar presión, un abrazote a distancia a tod@s y espero que el encierro acabe pronto y nos volvamos a ver. O que nos veamos por primera vez y nos demos un buen abrazo, por qué no ;-)

P.D. Hace tiempo perdí la esperanza de que un imbécil mejore: todos tenemos el derecho de comportarnos como imbéciles de vez en cuando, pero si abrazas la imbecilidad durante demasiado tiempo, eso cala hondo y se vuelve parte de ti. Creo que llega incluso a incrustarse en los cromosomas y se acaba transmitiendo de padres a hijos. Poca broma :-P